El derecho de los Nacionales de Washington, Max Scherzer, salió el domingo de la cueva hacia el campo para realizar su habitual rutina después de una apertura.
El vendaje de compresión en la pierna derecha era la única señal de que lidia con lo que, según una resonancia magnética, es una “torcedura” en la corva, dijo el dos veces ganador del Cy Young.
Scherzer abandonó el sábado su última apertura de campaña regular luego de tan solo tres innings y un tercio después de sufrir molestias en la corva mientras lanzaba un cambio. El equipo ordenó una resonancia magnética como medida preventiva.
“Reveló justo lo que pensábamos: Nada grave. Fue más una herramienta para ayudar a decirnos cómo necesitamos atenderla. Tenemos una muy buena idea de lo que necesitamos para poder volver a jugar. La buena noticia es que, puedo caminar pese a la molestia. No es nada grave, solo debilitante”, dijo Scherzer el domingo. “Estoy muy optimista sobre lo que viene”.